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martes, 1 de marzo de 2016

Por qué Ceuta y Melilla son españolas

 La España norteafricana: 
Además de Ceuta y Melilla: Islas de alborán, Chafarinas, 
Alhucemas, Peñón de Vélez de la Gomera, Isla de Peregil

Una de las reclamaciones territoriales más delirantes y absurdas del momento actual, es la del reino de Marruecos sobre las ciudades de Ceuta y Melilla. No se sostiene ni jurídica ( Derecho Internacional) ni históricamente, y es una demostración de cómo siendo persistente con un monotema, al final se crea un debate que nunca tendría que haber existido. 

A diferencia de Gibraltar, que fue española durante más de 4 siglos hasta que los ingleses decidieron quedársela en la guerra de sucesión, Ceuta y  Melilla nunca fueron marroquíes. Por una razón muy sencilla, que cuando ambas ciudades se reincorporan a la Corona Española, Marruecos ni siquiera había hecho su debut en la historia.

Ceuta y Melilla son ciudades singulares, cada una con su propia personalidad y su propia historia.

Vamos a contar esa historia de manera paralela, para hacer visible que la identidad de Melilla y Ceuta tienen mucho más en común con España que con Marruecos, incluso cuando buena parte de España fue musulmana.

Vamos a buscar los orígenes de Ceuta y Melilla, para ello tenemos que remontarnos a los fenicios, nada menos: son ellos, quienes, al mismo tiempo que sientan las bases en la península, crean en Melilla una colonia comercial (RUSADIR) haciendo lo propio con Ceuta. 


También estas dos ciudades, tuvieron un papel destacado en las guerras púnicas: sus puertos sirvieron muchas veces de bases a las operaciones navales de los cartagineses y romanos. Juntas pasaron a ser romanas: Melilla en el año 46 D.C. con el nombre de FLAVIA y Ceuta en el año 40 D.C. como SEPTEM FATRES.  Melilla se convirtió en un puerto de primera importancia en el tráfico comercial con el resto de Hispania.

El origen del nombre de Ceuta puede remontarse  
a la designación dada por los romanos a los siete 
montes de la región (Septem Fratres).

Cuando se hundió el imperio romano Ceuta y Melilla corrieron la misma suerte que el reto de España: fueron invadidas por los vándalos de Genserico y  Melilla quedo destrozada, Ceuta se convirtió en plaza bizantina. Pero las dos quedaron bajo la influencia visigoda. En Ceuta fue donde se produjo la traición  y felonía de D. Julián gobernador visigodo deCeuta.  Melilla languideció hasta casi desaparecer, pero aun con la invasión musulmana seguían siendo españolas.

Cuando se descompuso el califato cordobés en el siglo XIII, las luchas del reino de Fez y el reino de Tremecén, la ciudad melillense quedo completamente desecha y una vez más se convirtió en una tierra muerta y asolada, y Melilla desapareció. Y quienes devolvieron la vida a Melilla fueron los castellanos.
Los reyes Isabel y Fernando buscaban un cierto número de plazas en el norte de África, para que sirviera de puente a sus proyectos del sur. Melilla, arruinada y sola, mal cumplía con ese propósito, por ese motivo la descartaron. Sin embargo, alguien veía las cosas de otra manera. El capitán general de Andalucía, Juan Alonso Pérez de Guzmán, duque de Medina Sidonia, ve en esas ruinas un excelente enclave para instalar una base: es un llano protegido por montañas y a dos pasos del cabo de Tres Forcas. El duque resolvió enviar a un hombre de su confianza, su contable D. Pedro de Estopiñan, para que inspeccionara la zona. Era de origen aragonés y de la nobleza militar, su linaje llevaba tiempo instalado en Andalucía. Tenía fama de ser un tipo templado y de cabeza bien amueblada.
D. Pedro, recibe la orden del duque, viajar a la zona para reconocer el terreno y descubre que vale la pena reconquistar Melilla. Todo ello lo sabemos gracias al cronista Barrantes Maldonado.

El escudo oficial de Melilla es el de la Casa de Medina Sidonia. 
Tiene Corona Ducal que señorea Guzmán el Bueno en actitud 
de lanza un puñal desde el castillo de Tarifa.
 Lo sostienen las columnas del estrecho de Hércules, con la
 inscripción "Non Plus Ultra".
Incluye, asimismo, armas sobre campo de azur, dos calderas
 jaqueladas en oro y gules, gringoladas de siete serpientes en 
sinople, puestas al palo, bordadura de las Armas Reales de 
Castilla y León, de nueve piezas de gules, con castillos de oro,
 alternadas, con nueve piezas de plata con leones de gules.
También lleva divisa en su parte superior, detrás del castillo de Tarifa, 
una cinta alada con la leyenda:
                   "Praefere Patriam Liberis Parentem Decet"
                  (Conviene anteponer la Patria a la familia),
 y al pie del Escudo, pero fuera de él, un dragón en sinople.

Estopiñan, desempeñara importantes servicios para el duque y a los propios Reyes Católicos en lugares tan distantes como Gerona y Jerez. En esta última ciudad se afinco hasta el día de su muerte en 1505. Este es el hombre que reconstruyo Melilla. Desde entonces la Corona Española nunca abandonara Melilla.

Estatua de Pedro de Estopiñán en Melilla.

En 1640 cuando Portugal se desgaje de España, los ceutís decidirán que quieren seguir siendo españoles. Por eso Ceuta ostenta los títulos de Noble, Leal y Fidelísima, al tiempo que mantiene en su bandera las armas de Portugal.

Por lo tanto decir que Ceuta y Melilla es una reliquia colonial, es un disparate mayúsculo. Es no conocer la historia y pasarse por el arco del triunfo los tratados y acuerdos. Pero en este asunto, lo más importante no es la historia compartida, que es mucha y memorable, sino porque ellos siempre quisieron ser españoles.



Para saber más:

 - ROSA MARÍA RODRÍGUEZ MAGDA: INEXISTENTE AL ÁNDALUS. DE CÓMO LOS INTELECTUALES REINVENTARON EL ISLAM. Nobel (Oviedo), 2008

- ANTONIO ALMAGRO GORBEA, HAMID TRIKI Y MARIA JESÚS VIGERA(Fundación El Legado andalusí, Granada 1999) ITINERARIO CULTURAL DE ALMORÁVIDES Y ALMOHADES: MAGREB Y PENINSULA IBERICA.

- JUAN ESLAVA GALÁN: La agonía del reino nazarí



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