Para entender bien la enorme
aventura de la Reconquista hay que subrayar siempre un hecho fundamental: Por
encima y por debajo de las batallas, de los nombres de Reyes y de las crónicas
de corte, a finales del Siglo VIII hombres y mujeres de a pie, familias de
campesinos, iban ocupando tierras cada vez mas al sur, desafiando al peligro y
la muerte, en busca de una vida mas libre. También en el Siglo IX, con Ordoño
en Oviedo y Muhammad en Córdoba, los colonos cristianos siguen descendiendo
lentamente hacia tierras llanas.
No es que las aguerridas huestes
de Alfonso II el Casto hayan marchado a Córdoba para recuperar la España
perdida, la España invadida por el islam. Lo que esta pasando es otra cosa:
pequeños grupos de campesinos han empezado a saltar al sur de la Cordillera
Cantábrica. Llegan a parajes nuevos, toman las tierras, las roturan y se
instalan allí. Son los nuevos pioneros. Con ellos empieza realmente la Reconquista.
¿Cuándo comenzó el flujo de los
colonos? Se cree que desde el 780 al 790. El escenario de estas incursiones se
concreta en un area: La Bardulia, es decir. El solar original de lo que sera
llamada Castilla, aproximadamente entre el sureste de Cantabria, al noreste de
Burgos y al este de Álava. Es una zona todavía protegida por montañas, pero que
se abre ya a la meseta. ¿Estos pioneros actúan por cuenta propia o son enviados
por la corona? Mas bien por cuenta propia, ya que todo indica que se trata de
colonizaciones espontaneas de campesinos que se lanzan a la aventura por su
cuenta y riesgo. Después eso sí, la corona asturiana organizará los nuevos
territorios. Pero el impulso inicial es de los propios pioneros.
Se conoce un caso en concreto: el
de la familia formada por Levato y Muniadona y sus hijos, uno de ellos Zonio,
firmaría años más tarde en el texto de la Carta Puebla de Brañosera en el año
824, considerada como el primer fuero municipal de España. Gracias a ellos se
puede reconstruir unos hechos, que sin duda también se estaba produciendo en
otros puntos de la frontera. Lebato y Muniadona aparecen hacia el año 796 en el
Valle de Mena. Son cántabros que han llegado desde el Valle de Carranza a
través del Monte Ordute.
El valle de Mena
El valle de Mena no es un lugar
seguro: a pocos km. se encuentra la vieja calzada romana que lleva del norte de
Burgos a Castro Urdiales, mas o menos. Pero hablemos un poco de esta zona. La
frontera oriental del Reino de Asturias era desde antiguo un lugar disputado,
entre el oeste de la Rioja y de Álava, el sur de Vizcaya y de Cantabria, el
noroeste de Burgos. Desde allí se pasa del valle del Ebro al valle del Duero,
se puede tomar caminos que conectan el norte peninsular con la meseta, y la
llanura aragonesa con León y Galicia. Los romanos llenaron esta zona de
calzadas que va desde Zaragoza a Astorga y desde la meseta al Cantábrico. Toda
esa zona se llamaba Bardulia. En algún momento se lleno de gentes que venían de
Vizcaya, desplazados de sus tierras por los vascones.
Torre en Lezana de Mena
Esa mezcla de celtas, cántabros,
hispanoromanos, vascones y godos va cuajando en unas gentes de carácter feroz y
decidido, acostumbrados a soportar las acometidas islámicas, hacerles frente,
verlo todo arrasado y volver a empezar. En el siglo VII a esta zona se le dará
el nombre de Castilla.
¿Que hacían los Pioneros? ¿Como
se organizaban?. Se conoce el sistema porque luego se convirtió en institución
con rango de ley. 1º una familia ocupaba tierras y las señalizaban con mojones:
a eso se le llamaba “presura” y otorgaba el derecho de trabajar en el espacio
ocupado. Para evitar que alguien abusara del sistema, acaparando mas de lo que
podía trabajar, se formalizo otra institución llamaba “escalio”
Ese mismo sistema empezó a
emplearse en esa época por otras partes de España como Aragón y Cataluña, pero
con una diferencia, en la zona del Reino de Asturias los campesinos son libres,
incluso bajo un señor. Y para manifestar esa libertad, son ellos mismos quienes
tienen la libertad y el derecho de escoger al señor e incluso de cambiarlo
cuando les venga en gana. A este sistema se le llamo “behetría” un régimen jurídico
que venia del tiempo de los romanos y que los godos potenciaron.
En la zona de Aragón y Cataluña,
la estructura era propiamente feudal, un modelo contrario al de hombres libres
de la zona del Reino de Asturias.
BIBLIOGRAFIA PARA SABER MAS
-D. Claudio Sánchez Albornoz:
Orígenes de la nación española. Estudios críticos sobre la historia del del
Reino de Asturias. Publicado en 3 volúmenes por el Consejo Superior de
Investigaciones Científicas entre 1974 y 1975 y reeditado por la Caja de
Ahorros de Asturias en 1984. Otra obra importante: Sobre la libertad humana en
el reino asturleonés, publicado por Espasa-Calpe en 1978. Y en cualquier caso,
hay que leer la monumental: España, un enigma histórico (Edhasa, 1983).
-Luis Suárez Fernández: Historia
de España antigua y media (Rialp, 1975, dos tomos) y el tomo 5 de la Historia
de España de la editorial Gredos (1991), titulado: La España musulmana y los
inicios de los reinos cristianos: 711-1157.
-Es aconsejable leer a Julio
Valdeón: La Reconquista. El concepto de España: unidad y diversidad
(Espasa-Calpe, 2006) y La Alta Edad Media (Anaya, 2003)
-Hay dos libros importantes para
orientarnos acerca la Reconquista y de los Reyes españoles en la Edad Media.
Uno es de José María Mínguez: La españa de los siglos VI al XIII. Guerra,
expansión y transformaciones. En busca de una frágil unidad (Nerea, 1994). El
otro es de José Luis Villacañas Berlanga: La formación de los reinos hispánicos
(Espasa-Calpe, 2006)
-Hay estudios parciales que se
han hecho imprescindibles de José Ignacio Gracia Noriega: Don Pelayo, el Rey de
las Montañas (La Esfera de los Libros, 2006) y también: Historias de Covadonga
(Laria, 2008)
-Juan Ignacio Ruiz de la Peña,
tiene una monografía notable: La monarquía asturiana 718-910 (la edición mas
reciente es en Nobel, 2002)
-Si tenéis posibilidad, os
recomiendo consultar la edición del Real Instituto de Estudios Asturianos sobre
un simposio celebrado en Covadonga en 2001 y cuyas actas se agruparon bajo el
título: La época de la Monarquía asturiana.
Quedan muchos libros en el
tintero.