La historia oficial nos cuenta que el Rey Jaime I el Conquistador la fundo
en 1238.
Pero los descubrimientos del arqueólogo Miguel Ramón Martí el año 2001, nos
demuestra que el Reino de Valencia existía muchos siglos antes del nacimiento
de Cataluña. Está documentado que el rey de Valencia fue el rey visigodo
Leovigildo, por el siglo IV. El hallazgo de una moneda del año 583 donde se ve
el rostro, nombre “Livvigildus” y la inscripción “REX VALENTA” (REY DE
VALENCIA) lo corrobora. La moneda se encuentra en la Biblioteca Nacional de
Francia, en la sección de Numismática.
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http://agroicultura.com/general/valencia-una-fundacion-sin-fundamentos/
Año 1229, vamos a viajar hasta la frontera de Valencia.
Valencia no era una pieza fácil. Desde mucho tiempo atrás figuraba entre
las grandes ciudades de la península. Este enclave Ibero, romanizado después
como (VALENTIA EDETANORUM)
En el siglo XI era un espléndido reino de Taifas y durante unos años fue
capital del Cid, hacía 1102 y otra cuando la expedición de Alfonso el
Batallador, en torno a 1125. Esto significa que Valencia, ciudad ciertamente
bajo el poder islámico, pero solo muy parcialmente era musulmana.
Valencia por esas fechas, estaba viviendo la descomposición del imperio
almohade, gobernaba en Valencia un almohade llamado Zaid Abu Zaid que había
recogido el cargo de su padre y tío: todo un negocio familiar. Este mismo
gobernador de Valencia Zaid, años mas tarde se convirtió al cristianismo con el
nombre de Vicente Bellvis. En el año 1229 Zaid se ve desalojado del poder,
coguiendose al vasallaje de Jaime I.
Estamos en la primavera del año 1238, todo está preparado para el asalto
final a Valencia. Aquí es cuando entra en escena, según la tradición, un
animalillo, que terminaría siendo el animal heráldico del reino de Valencia.
Una noche, el rey despertó por el ruido del tambor que tocaba a rebato. La
tropa formó a toda prisa. El enemigo en efecto intentaba tomar el campamento.
Gracias a la alerta del tambor, la ofensiva enemiga fue desmantelada. El rey
busco al del tambor para recompensarle, pero lo que encontró al lado no fue un
hombre sino a un murciélago que batía las alas sobre la piel del tambor. Por
este hecho hay un murciélago en el escudo de Valencia.
El 9 de Octubre de 1238 entraba Jaime I en Valencia.
La conquista del reino de Valencia se completo años más tarde, cuando las
banderas de Aragón llegaron a la línea Biar-Villagoyosa.
Al paso de esa expansión, Jaime I repoblaba las tierras valencianas con una
singular política que iba a dejar a los nobles aragoneses y catalanes con dos
palmos de narices.
Jaime I era un rey serio y su corte un ejemplo de eficacia, de manera que
se procedió a llevar un minucioso registro de a quién se otorgaba qué. Este
registro se llamo Llibre del Repar Timent, (Libro del Reparto), que nos ha
llegado integro hasta el día de hoy. Hay una versión disponible en internet:
http://www.jaumeprimer.uji.es/cgi-bin/repartiment.php
Bucear en sus páginas es sumergirse en la España de un tiempo donde todo
era posible. El libro detalla la procedencia de los beneficiarios, y es
interesante ver que, entre los vencedores, no solo hay aragoneses – la mayoría
– y catalanes, sino también muchos navarros, bastantes franceses, italianos,
ingleses y hasta húngaros (no debemos de olvidar que la segunda esposa del rey
Jaime I era húngara)
La Biblioteca Valenciana alberga el 'Llibre del Repartiment', la "joya documental más importante" de la historia del Reino de Valencia |
En el (Llibre del Repartiment) de Valencia, mientras uno va repasando,
encuentra todos los nombres de los colonos, incluidas las mujeres, que en
ocasiones son propietarias en primera persona. Son miles de nombres.
Estos documentos son el libro de familia de los españoles de la
reconquista.
Jaime I hizo mucho más: para administrar el nuevo territorio, no lo puso
bajo el mando de la nobleza aragonesa ni catalana, sino que instituyó unos
fueros singulares que daban al reino de Valencia entidad propia (naturalmente
bajo el poder del propio Jaime). ¿Porque hizo eso el rey Jaime? Para poder
poner límites al poder de los magnates aragoneses y catalanes, así evitaba los
quebraderos de cabeza que en el pasado le habían traído. De esta forma Valencia
se regía por sus propios fueros e instituciones.
Fueros de Valencia otorgados por Jaime I el Conquistador |
El desarrollo de Valencia en los próximos decenios va obedecer directamente
a esta singularidad jurídica. El peso feuda es escaso en el reino – y en
particular en la propia Valencia – se gobiernan de manera bastante autónoma.
Los gremios de los oficios se organizan por libre y mantienen sus propias
instituciones. Tribunales preexistentes, como el de las Aguas, que data de la
época romana, siguen vigentes ahora. Todo eso crea una riqueza notable. Riqueza
que el propio Monarca va a aprovechar, porque Jaime, jurará los fueros
valencianos y por ello obtendrá sus buenos réditos.
Valencia, es un pueblo próspero, conservador, liberar y emprendedor, pero
demasiado individualista y pasota. Su falta de unidad, le ha hecho caer en las
garras del pancatalanismo.
El Pancatalanismo |
Valencia es hoy la sombra de lo que fue: un país acomplejado, dividido y
sometido desde Barcelona; un pueblo noble y herido que necesita recobrar su
identidad.
Una anécdota: Las investigaciones de Miguel Ramón Martí fueron publicadas en Inglaterra, en la prestigiosa editorial British Archaelogical Reports, después que la universidad de Valencia desdeñara y despreciara su trabajo.
Biblioteca para saber más:
- El libro de los hechos del Rey Jaime I. hay una
excelente edición de Julia Butinia Jímenez en Gredos (Madrid 2003)
- Visigodos, hispano-romanos y bizantinos en la zona de Valenciana en el
siglo VI de Josue Ferrer (España 2001)
- Una fundación de Valencia (Hispania). Antítesis de la tesis actual. Del
mismo autor (2005)
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